18 de febrero de 2011

Síndrome de Cotard, o zombitud


Le dije al hechicero, con rostro ceñudo, estoy seguro, que no entendía mi situación: incluso muerto sentía hambre.



© Enrique Ruiz Hernández

2 comentarios:

cuquita dijo...

los leí con la Nina y se rió muchísimo. la opinión en conjunto es: artefactos Parrianos sofisticadísimos.

Vanessa Alanís dijo...

cuando sea grande quiero ser zombi